Quiero detenerme un poco en este primer libro de Aldo, que se halla dividido temáticamente en veinticuatro capítulos, comenzando por Aprendizajes y finalizando con una sección de poemas, tratando además reflexiones sobre la sabiduría, la filosofía, el amor, la soledad, la educación, para mencionar solamente algunas de las partes, con trabajos de autores como la Madre Teresa de Calcuta, Borges, Shakespeare, Luis Landriscina, entre muchos otros... figuras heterogéneas que apuntan a un bien común. Un libro que he disfrutado y que busca multiplicarse cuando cae en manos fértiles.
Arar con caballos es un libro que no se perderá en el tiempo. Se publica gracias al aliento de su esposa y de sus cinco hijos (tres ingenieros agrónomos, una arquitecta y una profesora de historia) y está muy bien ese empuje de su entorno familiar directo.
Además, esta obra constituye un legado, porque Aldo no pretende lucrar, sino simplemente establecer una comunicación entre el pasado que fue, el presente que es y el futuro que será.
Aldo ha cumplido ampliamente con aquello de tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro. Démosle la calurosa bienvenida a la presente obra, que bien se lo merece su autor.
Adolfo Argentino Golz
Un día de verano de 2013